miércoles, 27 de febrero de 2019

Qué significa, para mí, el camino al Hatun Soncco?

Despacho en forma de corazón
Hatun Soncco... en Quechua significa "Gran Corazón"
Ese gran corazón, que es uno solo, 
Ese Gran Corazón que somos todos...

Ese gran corazón nuestro que es cada vez más y más grande cuando más cerquita del amor estamos, pero no de cualquier amor... sino de ese amor al que llamamos Munay, ese amor que está por sobre todos nosotros, por sobre todas las cosas, ese amor inconmensurable, ese amor empoderado.

En ese primer viaje a Cusco, logré ponerle un nombre a este caminito que desde hace años me viene llevando a lugares y personas tan maravilosas...
Un caminito por el que me dejo llevar, acompañada de la voz de mi corazón y que, de repente y casi sin pasar por mi consciencia, me llevó a compartir horas y horas con la familia Apaza, con Mama María, con su Ayllu, con ellos, los tan nombrados y admirados por mí, los Q'ero, los que me permitieron formar parte de su familia

Cuando me preguntan qué fui a aprender al lado de los Q'ero... no puedo responder, porque lo que más hice fue sentir, vivir, amar, reir, cantar, y saber que soy una con la Naturaleza Toda...

Por eso, para quienes todavía me preguntan qué hice en Cusco... dejo estas fotos que, creo, hablan por sí solas



Mama María Apaza y yo, tejiendo una watana



Fogón previo a la quema de los despachos

Nuestras Mishas

Mama María Apaza bajando del Humantay

Cartel indicador "Soraypamapa
Altitud: 3800 msnv
Abra Salkantay a 7,5 km

Mamá María y yo, tejiendo una watana




Mamá María y yo, tejiendo una watana

Tejidos realizados por los Q'ero.
En la base de los cerros Humantay y Salkantay
Detrás se ven los refugios donde dormimos

Junto a Manuel Jerillo Apaza,
con quien armé mi Misha y mi dispacho de iniciación como
Pampamisayoq

Cartel indicador del mirador de Cóndores de Chona

En Chonta, en el mirador de cóndores,
se ve el sol escondiéndose detrás de los cerros

Mamá cocha Humantay
Laguna sagrada de Humantay

Valle sagrado de Calca, Cusco


Avistaje de Cóndores en Chonta

Junto a Alejandro Apaza
en el Parque Arqueológico Pikillaqta




Y si elegimos ver el sol?

Y si en lugar de acostarte, dormirte, envolverte y abrigarte en alguna situación que en este momento te supera, te entristese... elegís ver el sol?
Diente de León y detrás el sol.

Es un segundo en que tomamos una decisión u otra: Elegimos compadecernos de nuestro presente, o elegimos disfrutar de lo hermoso que la vida nos da (a pesar de...)

Yo elijo...
Ver el sol,
disfrutar de las flores, los cactus, las nubes, los pájaros.
Mirar al cielo,
disfrutar las nubes, las estrellas, la luna...
Tomar un mate... ponerme a crear!

Porque, aunque a veces me lo olvido, con el tiempo aprendí que todo es perfecto! Que no hay cosas buenas y cosas mala... que solamente hay cosas que pasan (Ya sé, sé perfectamente quien me diría lo contrario... y lo acepto, lo entiendo... y elijo vivirlo de otra manera)
Sé que hay cosas que suceden, aunque jamás las hayamos deseado, y que no podemos hacer nada para modificarlas... 
Entonces... porqué no elegimos ver el Sol, amar a la Luna, sentir al Viento en la piel y hablar con nuestros seres queridos, abrazar o tomar de la mano a quien amamos... y así... soltar la tristeza, soltar nuestros deseos, para que haya más lugar en nosotros para amar, para ser amados, para disfrutar, para vivir la vida!

Hoy elijo mirar el Sol, respirar el aire y sonreir!